Mesoterapia: Historia y ejemplos de uso
La mesoterapia es una técnica muy antigua usada en la medicina desde el siglo pasado. Ésta consiste en la inyección local de sustancias, llegando lo más cerca posible al punto donde se focaliza la enfermedad que se busca paliar o curar.
En medicina estética se utiliza con frecuencia para realizar tratamientos faciales y corporales, encaminados a corregir defectos propios del envejecimiento, y consiste en la infiltración intradérmica o subcutánea de sustancias naturales de eficacia comprobada.
Historia de la mesoterapia
La mesoterapia tiene su origen en el año 1950 cuando el Dr. Pistor en el intento de curar una patología asmática, empleando procaína inyectada, se dio cuenta de que no había servido para el asma, pero que había producido una mejora en la sordera que padecía el paciente.
A raíz de este incidente, comenzó a tratar una serie de patologías siguiendo el protocolo base de inyectar el activo médico para llegar así al foco de la enfermedad.
Para efectuar estas infiltraciones contó con la colaboración del Dr. Lebel, que le suministro unas agujas muy cortas y finas. Éstas le facilitaron la inyección intradérmica de medicamentos, sin apenas dolor y con mucha mayor precisión.
Con el paso de los años, esta técnica se ha ido perfeccionando hasta llegar a nuestros días. Actualmente, la mesoterapia se practica con tecnologías muy avanzadas, para tratar tanto patologías propias de la medicina general, como de la medicina estética.
Ejemplos de tratamientos
Los tratamientos con mesoterapia pueden aplicarse en cualquier parte del cuerpo, y es apenas dolorosa.
- Mesoterapia para la prevención del envejecimiento facial. En este tratamiento se emplean vitaminas de los grupos B, C, E y A, junto con minerales y otras sustancias naturales (ácido hialurónico) para prevenir y frenar el envejecimiento, gracias a sus propiedades hidratantes y regenerativas.
- Mesoterapia para reducir la celulitis: En este caso la mesoterapia se emplea para destruir los depósitos grasos localizados bajo. Los principios usados son homeopáticos o alopáticos, y además reactivan la circulación linfática y sanguínea.
En Iradia, nuestra clínica de medicina estética en Valencia, empleamos sustancias de origen natural, como vitaminas, oligoelementos o ácido hialurónico para evitar reacciones adversas, logrando así resultados estéticos acordes con las características y necesidades de cada paciente. Si deseas más información puedes contactar con nosotros sin compromiso alguno, y te atenderemos encantados.